Con las nociones vistas hasta este momento se puede decir que podríamos traducir un gran porcentaje de textos latinos. Como ejemplo, esta frase que Cicerón escribió en su libro De natura deorum que dice así: beatus autem ese sine virtute nemo potest; cuya traducción nos aventuraríamos a realizar del modo siguiente: ahora bien (autem), nadie (nemo) puede (potest) ser (esse) feliz (beatus) sin (sine) virtud (virtute). Hay que tener en cuenta que el verbo “possum” está formado por el prefijo “pot-“ y el verbo “sum”, en cuya unión el contacto de la consonante interdental con la silbante hace que la primera se asimile a la segunda, de modo que de un primer *pot-sum se pasó al definitivo pos-sum; el resto de las formas verbales sigue los mismos pasos: pos-sum, pot-es, pot-est, pos-sumus, pot-estis, pos-sunt (presente de indicativo).
Otro ejemplo de este verbo lo encontramos en una frase que San Cebrián plasmó en sus Epístolas y que fue si mortem possemus evadere, merito mori timeremus. “Pos-se-mus” está, como se ve, en imperfecto de subjuntivo (desinencia “-se-“), pues se trata de una oración condicional irreal (si pudiéramos evadir la muerte); así que la traducción sería: si pudiéramos evadir la muerte, con razón temeríamos morir.
En su libro De beneficiis, Séneca escribió naturam voca, fatum fortunamque; omnia eiusdem dei nomina sunt. Teniendo en cuenta que “voca” es imperativo, la primera parte podríamos traducirla por lláma(lo) naturaleza, hado y fortuna. En la segunda parte tenemos dos nominativos neutros (sujeto y atributo) y dos genitivos (eius+dem) que precede, como suele ser usual, a la palabra de la que dependen; por este motivo se podría traducir como todas las cosas son nombres del mismo dios.
Cicerón escribió deum non vides, tamen deum agnoscis ex operibus eius en su libro Tuculanas. No hay problema para traducir el principio: a dios no lo ves. Por lo que respecta al final, tampoco debería haber mayor dificultad: sin embargo a dios lo conoces de las obras de éste o lo que es lo mismo: sin embargo a dios lo conoces por sus obras.
Según un aforismo medieval dat bene, dat multum, qui dat cum munere vultum, lo cual viene a decir en español da bien, da mucho, quien da con buena cara. Otro aforismo medieval aconseja ne quid agas nimium vehemens, que en español sería no hagas nada con excesiva vehemencia.
El poeta Horacio, en el tercer libro de sus Odas, escribió multa petentibus desunt multa; bene est cui deus obtulit parca quod satis est manu, larga frase que viene a traducirse como a los que piden mucho, mucho les falta; bien está para quien el dios le ha proporcionado lo que es suficiente con mano escasa.
En fin, en otro momento nos tomaremos más tiempo para analizar otras declinaciones y otras conjugaciones, así como para traducir otro tipo de textos más complejos, con frases que parecen no tener fin, sobre todo porque van dirigidas a lectores cultos y no a una audiencia popular. Quedan, pues, en el tintero los tiempos de la voz pasiva o las declinaciones de otros pronombres y adjetivos.
Otro ejemplo de este verbo lo encontramos en una frase que San Cebrián plasmó en sus Epístolas y que fue si mortem possemus evadere, merito mori timeremus. “Pos-se-mus” está, como se ve, en imperfecto de subjuntivo (desinencia “-se-“), pues se trata de una oración condicional irreal (si pudiéramos evadir la muerte); así que la traducción sería: si pudiéramos evadir la muerte, con razón temeríamos morir.
En su libro De beneficiis, Séneca escribió naturam voca, fatum fortunamque; omnia eiusdem dei nomina sunt. Teniendo en cuenta que “voca” es imperativo, la primera parte podríamos traducirla por lláma(lo) naturaleza, hado y fortuna. En la segunda parte tenemos dos nominativos neutros (sujeto y atributo) y dos genitivos (eius+dem) que precede, como suele ser usual, a la palabra de la que dependen; por este motivo se podría traducir como todas las cosas son nombres del mismo dios.
Cicerón escribió deum non vides, tamen deum agnoscis ex operibus eius en su libro Tuculanas. No hay problema para traducir el principio: a dios no lo ves. Por lo que respecta al final, tampoco debería haber mayor dificultad: sin embargo a dios lo conoces de las obras de éste o lo que es lo mismo: sin embargo a dios lo conoces por sus obras.
Según un aforismo medieval dat bene, dat multum, qui dat cum munere vultum, lo cual viene a decir en español da bien, da mucho, quien da con buena cara. Otro aforismo medieval aconseja ne quid agas nimium vehemens, que en español sería no hagas nada con excesiva vehemencia.
El poeta Horacio, en el tercer libro de sus Odas, escribió multa petentibus desunt multa; bene est cui deus obtulit parca quod satis est manu, larga frase que viene a traducirse como a los que piden mucho, mucho les falta; bien está para quien el dios le ha proporcionado lo que es suficiente con mano escasa.
En fin, en otro momento nos tomaremos más tiempo para analizar otras declinaciones y otras conjugaciones, así como para traducir otro tipo de textos más complejos, con frases que parecen no tener fin, sobre todo porque van dirigidas a lectores cultos y no a una audiencia popular. Quedan, pues, en el tintero los tiempos de la voz pasiva o las declinaciones de otros pronombres y adjetivos.